El área de Medio Ambiente del Gobierno de Junín lleva adelante diversas acciones de reciclaje en la ciudad. En tal sentido, algunos de los programas que se impulsaron para capacitar y concientizar a la comunidad para el cuidado del medio ambiente son: “Otro destino es posible”, con la recolección de aparatos eléctricos y electrónicos en el Beto Mesa, los cuales luego son trasladados a unidades penitenciarias para que se reciclen las partes que sirven; “Tu acción cuenta”, con los puntos verdes ubicados en distintos sectores de la ciudad destinados a los residuos reciclables; “Un mural por mi planeta”, en articulación con la iniciativa “Plan BIO” de recolección de aceite vegetal usado para transformarlo en biocombustible; los “Corazones Solidarios”, para la recolección de tapas de gaseosa en conjunto con la ONG “Corazón Joven”.
Vale destacar las Eco botellas que el vecino puede hacer con todo lo que es envoltorio plástico y ponerlo dentro de cualquier botella plástica, y de esta manera se rellenan y luego se depositan en los Puntos Verdes.
Asimismo se ha trabajado en la campaña abocada al reciclado de neumáticos con el propósito de que estos residuos también tengan un destino correcto.
Más allá de todas estas acciones del Municipio, funciona una red de carreros o cartoneros que recorren las calles de nuestra ciudad en busca de cartones, vidrios, botellas plásticas y papel, que luego venden a distintas empresas.
Política ambiental
Al ser entrevistada por Democracia, Cecilia Laffaye, directora de Ambiente del Municipio, explicó, respecto al reciclado, los distintos programas de gestión integral de los residuos urbanos que van al Relleno Sanitario y a otros sitios.
La funcionaria detalló cómo puede uno, como vecino, colaborar en el reciclaje: “Uno en su casa puede separar los residuos húmedos de los secos. El húmedo sirve para hacer compostaje y el seco va a las campanas, en los denominados Puntos verdes, unos 30 en Junín. Son contenedores blancos ploteados donde los vecinos pueden colocar los residuos para reciclar (plástico, papel, cartón, vidrio y metal), que tienen que estar limpios y secos”.
En cuanto a cómo continuaba el proceso, cabe decir que es el camión de Ashira el que recolecta cada contenedor de reciclables y lo lleva al Centro Ambiental, ubicado en el predio del Relleno Sanitario de Junín. Según lo explicado por la funcionaria, es un complejo de importantes dimensiones donde está la Planta de separación y clasificación de residuos reciclables de los puntos verdes.
“Ahí trabajan alrededor de 30 personas de la Cooperativa Las Marías, separando y clasificando los residuos desde que se inauguró la Planta de Separación y Clasificación de residuos. Tienen su prensa, su autoelevador, la cinta. Ellos hacen uso de todo lo que van recuperando y venden todos esos residuos reciclables. Tienen sus compradores, y en este punto el Municipio no interviene. La comuna hace que todos los residuos les lleguen, pero después ellos se hacen cargo”, aclaró.
El trabajo de sacar todo lo clasificado del Relleno Sanitario y llevarlo a las empresas recicladoras lo hacen los propios trabajadores, en vehículos contratados o de la manera que puedan.
“Es increíble lo que hacen, es buenísimo. Y no paran nunca porque los residuos se generan continuamente”, destacó Laffaye, al hablar de lo que realizan las personas que trabajan en dicha planta, para las cuales el Municipio puede colaborar proporcionándoles ropa de trabajo, guantes y demás.
Otros programas de reciclaje
“Hay muchos residuos que no van para el relleno sanitario, entonces se diseñan distintos programas para poder separar los mismos y que no vayan a la celda de disposición final”, explicó Laffaye. Respecto al destino de los residuos orgánicos, la directora de Ambiente dijo que, si eran separados en cada hogar, se podían compostar; de lo contrario eran recolectados por Ashira, trasladándoselos al Relleno Sanitario.
“Las tapitas de botellas de plásticos suelen ser puestos en contenedores en forma de corazón, que corresponden a proyectos del Club de Leones y de la ONG Corazón Joven. La recolección la hace la Municipalidad, que vende el material a la empresa recicladora y el dinero de la empresa se transfiere al Hospital Interzonal de Junín”, apuntó.
Los cartoneros
Diariamente, los cartoneros son los protagonistas del proceso inicial, para luego lograr reciclar y mejorar el ambiente. Su trabajo diario y su esfuerzo, muchas veces en condiciones muy difíciles, hacen que los cartones, plásticos, metales, vidrios sean separados del resto de la basura y puedan así reciclarse. Más de 50 familias trabajan en la separación y clasificación, sea en la misma ciudad o en el Relleno Sanitario.
En el proceso de reciclaje de residuos, resulta fundamental la persona que los recolecta, muchas veces desde los mismos domicilios, para luego unirse a la cadena que lo depositará en las empresas que procesan dicho material y lo transforman en algo usable.
Es así que, en nuestra ciudad, trabajan varios cartoneros o carreros, quienes los días lunes, miércoles y viernes recorren las calles juntando cartones, papeles, botellas de plástico, botellas de vidrio, hierros, bronces y latas. Todo eso que puede transformarse y ser reutilizado.
Al respecto, unas 22 personas cumplen esa tarea con esfuerzo y escasos medios. Ellos trasladan lo que juntan hacia lugares donde, luego, los clasifican y después trasladan a empresas o sitios que hacen el reciclaje.
Pertenecen a la cooperativa Las Marías y tienen recorrido fijos por distintos lugares de la ciudad, tanto céntricos como barriales.
Como en la ciudad no hay un lugar específico donde hacer la tarea de clasificación, cada carrero hace ese trabajo en su casa o en otro lugar donde se le facilite la tarea. Además, muchas veces se hacen cargo de los costos del transporte de dicho material a las empresas: una de ellas está en el Parque Industrial y otra en cercanías de clínica La Pequeña Familia, entre otras ubicadas en distintos lugares donde les compran cartones, vidrios y demás.
Guillermo Mercau es uno de los carreros de Junín que pertenece a Las Marías. Al ser consultado por Democracia, Mercau dijo: “Si nosotros tuviéramos un galpón para clasificar, tenemos las máquinas para hacer el enfardado y los vendemos nosotros a mejor precio, dando trabajo también a más gente para que manejen las máquinas y demás”.
“Tenemos máquinas para hacer fardos de cartones, pero no tenemos dónde ponerlas. Hay distintas máquinas que nos pueden facilitar también”, acotó.
En este punto cabe mencionar que varios de los carreros pertenecen a un gremio, a la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP).
Existen también las promotoras ambientales, que cumplen un rol de difusión fundamental, ya que son las encargadas de hablar directamente con responsables de comercios, supermercados y locales gastronómicos para organizar el reciclado en días y horarios a retirar el material descartable y factible de reciclaje de cada local que acepta la propuesta.
Johana, una de las promotoras consultadas por Democracia, mencionó que ellas tenían varios recorridos para ir a los comercios para concientizar sobre la utilidad del reciclaje, para que los materiales (papel, cartón, vidrio, metales, nylon, stretch para embalaje), que ellos descartan puedan recolectarse y transformarse en algo útil.
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